Durante años sufrí el estrés al que nos lleva este ritmo de vida actual casi sin darnos cuenta. Una vida en la que tenemos que enfrentarnos a numerosas presiones, pérdidas y retos. En una de esas pruebas que te pone la vida, un día encontré el anuncio de un masaje que hablaba del alma, de los sentidos y sentí que mi alma necesitaba algo más que una simple descarga muscular. Nada más tumbarme en la camilla supe que Ayurveda era algo más, era el masaje más completo que había experimentado nunca. Recibí infinidad de masajes y aproveché para tomar conciencia de mis emociones a través del cuerpo así como de responsabilizarme de mi salud.
Mientras tanto ejercía otra actividad profesional en la que regalé masajes ayurveda a mi equipo de trabajo y seres queridos. Hasta que sentí la necesidad de que hubiera una coherencia entre mi profesión y mis valores. Fue entonces cuando me formé en distintas disciplinas de masaje Ayurveda completandolo con formaciones en quiromasaje, drenaje linfático, deportivo, reiki y facial.
De ahí nace Satya Mans (verdad en las manos) fruto de un trabajo personal, una forma de entender al ser humano en su totalidad y de forma individual. Creando un espacio seguro donde poder poner en valor el respeto, el autocuidado y la prevención. En el masaje ayurveda encuentro una forma de expresar mi creatividad, leyendo y dibujando sobre el cuerpo.
Como apasionada de la comunicación, en Satya Mans también he querido crear encuentros donde compartir la sabiduría del Ayurveda y proporcionar a las personas las herramientas necesarias para su crecimiento personal. Y de esta manera, Satya Mans es un espacio completo donde sanar cuerpo, mente y alma.
Financiado por la Unión Europea – NextGenerationEU
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